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La rueda de la ira es una herramienta básica en Disciplina Positiva. Se utiliza cuando nuestro nivel de enfado está empezando a notarse y nos permite elegir una herramientas entre varias que nos permitirán paliar la rabia que está abriéndose paso.
Lo primero que hay que hacer es reunirse toda la familia y explicarles que vamos a crear una herramienta que nos va a permitir calmarnos antes de que la ira estalle. Para ello cogemos lápiz y papel y comenzamos a escribir.
Se trata de una lluvia de ideas de herramientas a utilizar. Si los niños son demasiado pequeños podemos dar las ideas nosotros. Hay que apuntar todas las ideas incluso las que los niños digan aunque no sean factibles o no tengan lógica.
Por ejemplo:
– Usar el bote de la calma.
– Ir a otra habitación.
– Escuchar música….
Una vez tengamos el listado, decidiremos cuáles serán las herramientas que vamos a utilizar. Después recortaremos un círculo de cartulina y lo dividiremos en tantas porciones como acciones hemos elegido. Escribiremos una acción en cada porción. Se pueden utilizar dibujos, frases, recortes de revistas, etc. Lo ideal es hacerlo con los niños.
Cuando ya lo tengamos todo a nuestro gusto, lo dejaremos en un lugar accesible a todos los miembros de la familia. Nosotros hemos aprovechado para crear la cesta de la paz y allí hemos añadido el libro del monstruo de colores, un estuche con pinturas, folios, el bote de la calma y la rueda de la ira.
Cuando estamos un poco molestas y vemos que la ira va a salir, recurrimos a la rueda. Elegimos una opción y la ponemos en práctica. La mayoría de las veces funciona. Siempre y cuando nuestro semáforo de las emociones no esté en color rojo ya.
Esta es nuestra rueda. Como veis no es necesario hacer un diseño muy elaborado. Nosotras la hicimos en cinco minutos y nos funciona muy bien igualmente.
A continuación dejo enlaces a otras ruedas para inspiraros.